En mayo de 2024, el Papa Francisco anunció el Año Jubilar 2025 con la Bula Papal Spes Non Confundit ('La esperanza no defrauda') inspirada en Romanos 5:5. En la Bula, el Santo Padre subrayó que este Jubileo "será un Año Santo caracterizado por la esperanza que no declina, la esperanza en Dios" y rezó para que nos ayude a "recuperar la confianza necesaria –tanto en la Iglesia como en la sociedad– en los vínculos interpersonales, en las relaciones internacionales, en la promoción de la dignidad de toda persona y en el respeto de la creación" (SNC n. 25).